El objetivo del tratamiento es evitar la osteoporosis ya establecida, lo que se conoce como fractura osteoporótica, y en el caso de que ya exista, se trata de evitar una nueva.
Las medidas preventivas que se pueden adoptar a cualquier edad para prevenir la osteoporosis están encaminadas a alcanzar el máximo de masa ósea.
Para el tratamiento de esta patología tenemos una medidas no farmacológicas o preventivas y unas medidas farmacológicas.
- Medidas no farmacológicas
- Dieta adecuada rica en calcio: el calcio se encuentra principalmente en la leche y derivados lácteos como el queso o el yogur.
- Aporte de vitamina D: favorece la absorción del calcio y su incorporación al hueso.
- Evitar el consumo de tabaco y alcohol.
- No excederse con la cafeína: ya que esta tiene un efecto diurético que hace que la excreción de calcio a través de la orina sea más abundante de lo habitual.
- Ejercicio físico diario: esto aumenta la masa ósea y disminuye el riesgo de fracturas.
- Medidas farmacológicas
El uso de fármacos está indicado en pacientes que tengan un mayor riesgo de presentar una fractura.
- Calcio y vitamina D: su uso está recomendado en personas ancianas con baja ingesta de estos elementos.
- Bifosfonatos: producen un descenso en la reabsorción ósea o destrucción del hueso.
- Raloxifeno: actúa sobre los receptores de los estrógenos. Disminuye la frecuencia de fracturas vertebrales.
- Terapia hormonal sustitutiva: este tratamiento esta indicado en algunas mujeres tras la menopausia cuando no toleran otros fármacos y además tienen síntomas importantes en relación con la pérdida de la menstruación.
- Calcitonina: disminuye la aparición de nuevas fracturas.
- Teripratida: es un fragmento de hormona paratiroidea que ayuda a la formación del hueso.
- Denosumab: es un anticuerpo monoclonal antirresortivo con un papel importante para evitar la fractura osteoporótica vertebral y de cadera.