El tratamiento del cáncer de pulmón va a depender de la etapa y de la extensión del cáncer, del tamaño del tumor y del tipo de cáncer de pulmón.
Las principales opciones son:
- Cirugía.
- Radioterapia.
- Quimioterapia.
- Inmunoterapia.
CIRUGÍA
El objetivo de esta es extirpar el tumor y los ganglios linfáticos próximos en el tórax. Cuando las células del cáncer no son pequeñas, se recomienda hacer una lobectomia pulmonar, que consiste en extirpar el lóbulo pulmonar completo.
RADIOTERAPIA
Se trata de aplicar una dosis de radiación adecuada dirigida a reducir las células cancerosas y reducir el tamaño del tumor.
Este tipo de tratamiento no se emplea para tratar cánceres diseminados ya que la radiación daña tanto a las células cancerosas como a las células sanas.
QUIMIOTERAPIA
Esta opción se emplea para destruir las células cancerosas de todo el cuerpo. La mayoría de estos medicamentos se aplican por vía intravenosa. Los medicamentos que se emplean en esta terapia pueden dañar también a las células sanas del cuerpo, provocando así un recuento bajo de glóbulos rojos, blancos, plaquetas y alto riesgo de infección.
Pueden aparecer efectos secundarios como caída del pelo, nauseas, vómitos y fatigas.
INMUNOTERAPIA
Este tratamiento deja de dirigirse al tumor para dirigirse a reforzar los recursos del sistema inmunológico del paciente.
Los fármacos se emplean parecen ser más eficaces cuanto mayor sea el número de mutaciones genéticas sin identificar que tenga el tumor, por esta razón, esta terapia tiene más éxito en pacientes que son fumadores.