domingo, 25 de diciembre de 2016

PARKINSON

La enfermedad de Parkinson, también denominada mal de Parkinsonparkinsonismo idiopáticoparálisis agitante o simplemente párkinson, es una enfermedad degenerativa producida por la muerte de neuronas de la sustancia negra, que producen dopamina. Cuando existe esta falta de dopamina se produce un trastorno del movimiento. 


La enfermedad de Parkinson es una enfermedad crónica y afecta de diferentes maneras a cada persona las cuales  suelen presentar sus primeros síntomas alrededor de los 60 años, pero puede aparecer antes. Es mucho más común entre los hombres que entre las mujeres. No existe una cura para la enfermedad de Parkinson.

SÍNTOMAS PARKINSON

Resulta difícil la detección de algunos síntomas de la enfermedad de Parkinson, o si los notificamos, relacionarlos con la existencia de esta patología. Además, son distintos según el paciente y el ritmo de empeoramiento de la enfermedad. Debemos destacar entre dos tipos de síntomas:

Síntomas motores
En general, son los más conocidos, ya que estos son los signos del trastorno más visibles. Entre los síntomas principales de la enfermedad se incluyen los siguientes:
  • Bradicinesia: desaceleración o pérdida en movimientos voluntarios y espontáneos. Puede manifestarse pro medio de una caligrafía pequeña y lenta, o mismo por la torpeza en la manipulación de objetos. Está presente en aproximadamente el 70% de los enfermos. Afecta principalmente a extremidades superiores y es un síntoma común en fases iniciales.
  • Rigidez o hipertonía muscular: inflexibilidad o resistencia inusual a la hora de movilizar una extremidad u otra parte del cuerpo.
  • Temblores lentos y rítmicos, principalmente en estado de reposo: un movimiento incontrolable que afecta una extremidad en descanso y desaparece durante un movimiento consciente.
Entre otros síntomas encontramos la inestabilidad postural junto a la pérdida de equilibrio y coordinación en los movimientos. Pueden aparecer signos físicos como dificultad en la marcha y la disminución en cuanto a lo referido a expresiones faciales.

Síntomas no motores
Se reconocen cada vez más la existencia y efectos de otros síntomas de la enfermedad de Parkinson, los no motores o resistentes a dopamina. Son comunes y pueden afectar en gran medida a los pacientes enfermos de Parkinson. Es de importancia destacar los mencionados a continuación:
  • Deterioro cognitivo: disminución de la capacidad para realizar varias tareas y/o concentrarse. Es posible notificar una disminución en el funcionamiento intelectual
  • Trastornos de origen  depresivo, acompañados de aislamiento social
  • Problemas a la hora de conciliar el sueño. Desincronización, insomnio para coger el primer sueño y frecuentes pesadillas
  • Presión arterial baja al estar de pie
  • Sudoración excesiva
  • Sialorrea: salivación excesiva
  • Dolores de tipo muscular y óseo
  • Trastornos de tipo respiratorio
  • Incontinencia urinaria
  • Estreñimiento
Toca destacar en este punto, que son pacientes con tendencia a padecer dermatitis seborreica, perder olfato o dificultades para tragar o para el habla. Son frecuentes problemas de carácter sexual, que pueden ir desde una falta de deseo o impotencia o totalmente al polo opuesto, una excitación excesiva. Por último, pueden presentar problemas oculares, como sequedad o picor en los ojos, visión doble o falta de enfoque del campo visual.

DIAGNÓSTICO PARKINSON

Lo primero será evaluar la historia clínica del paciente, conocer los factores de riesgo a los que está expuesto y realizar una exploración física y neurológica. En algunos pacientes será necesario realizar:
  • Análisis de sangre y orina, para valorar la presencia de ciertos marcadores hormonales.
  • Pruebas de diagnóstico por imagen, como puede ser una tomografía computarizada (TAC), una tomografía por emisión de positrones o una resonancia magnética (RM). Estas no aportan datos diagnósticos, pero nos ayudan a descartar otras posibilidades de sintomatología similar, como son una hidrocefalia, un tumor cerebral o un problema cerebrovascular. Además, también nos informan de la funcionalidad general del cerebro del paciente.
RM comparativa entre una persona sana y un
paciente que padece Parkinson.

  • Exámenes neurofisiológicos, como puede ser el análisis de los reflejos troncocerebrales, el análisis del sistema nervioso autónomo (SNA) o la evaluación de la fuerza, características y frecuencia de los temblores.
Lo más importante es establecer una clara diferencia entre el diagnóstico de un caso de Párkinson, y el de otras enfermedades y trastornos que puedan poseer como síntoma el parkinsonismo, ya que este es secundario a otra dolencia y no es un trastorno en sí.

Aquí os dejo un vídeo que explica más detalladamente el procedimiento del diagnóstico del Párkinson:




TRATAMIENTO PARKINSON

Esta es una patología, que por el momento no tiene cura. El objetivo de su tratamiento es reducir la velocidad de su progresión, controlar los síntomas y los efectos secundarios derivados de los fármacos que se usan para combatirla. Para llevar a cabo esto, se emplea un tratamiento farmacológico, un tratamiento quirúrgico y unos ejercicios físicos.

  • Tratamiento farmacológico
Los fármacos más empleados son:
  1.  Levodopa: es considerado como el medicamento más eficaz contra los síntomas motores, este puede tener efectos secundarios como vómitos, nauseas, hipotensión y otros.
  2. Bromocriptina y pergolida.
  3. Selegilina: bloquea una de las vías de metabolización de la dopamina, provocando un aumento de la producción de esta en el núcleo estriado del cerebro.
  4. Anticolinérgicos: los síntomas que mejor alivian son la rigidez y la bradicinesia.
  5. Amantadina: reduce la intensidad de las discinesias, pero puede provocar edemas, confusión e insomnio.  
  • Tratamiento quirúrgico
La cirugía pretende actuar sobre la parte dañada del cerebro, solo está indicada en un 5% de los pacientes. Entre las técnicas quirúrgicas que se realizan para aliviar los síntomas se encuentran: la palidotomía y la estimulación eléctrica.

En la siguiente gráfica podemos observar una serie de síntomas del parkinson, que varían su intensidad antes y después de ambos procedimientos quirúrgicos.



sábado, 24 de diciembre de 2016

ALZHEIMER

La enfermedad de Alzheimer, también denominada demencia senil de tipo Alzheimer o simplemente alzhéimer , es una enfermedad neurodegenerativa primaria que suele aparecer a partir de los 65 años (aunque puede aparecer antes) que se manifiesta como deterioro cognitivo y trastornos conductuales. Se caracteriza en su forma típica por una pérdida de la memoria inmediata y de otras capacidades mentales, a medida que mueren las células nerviosas debido a la falta de acetilcolina y se atrofian diferentes zonas del cerebro. La enfermedad suele tener una duración media aproximada después del diagnóstico de 10 años, aunque esto puede variar en proporción directa con la severidad de la enfermedad al momento del diagnóstico.


La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia, es incurable y terminal. Comienza lentamente, primero afecta a las partes del cerebro que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje. Las personas con el mal pueden tener dificultades para recordar cosas que ocurrieron en forma reciente o los nombres de personas que conocen. 

CAUSAS Y SÍNTOMAS ALZHEIMER

CAUSAS
El Alzheimer se produce debido a la reducción de la producción cerebral de un neurotransmisor, la acetilcolina, lo que desencadena un deterioro en el rendimiento de los circuitos colinérgicos del sistema cerebral. 

Es difícil determinar quién va a desarrollar la enfermedad, por que es una alteración neurológica compleja, de causa completamente desconocida hasta el momento. Sin embargo, se saben de múltiples factores que si influyen a la hora de aumentar las posibilidades de padecer de esta patología. Entre ellos cabe destacar:
  • Edad. Suele afectar a mayores de 60 años, pero también se conocen casos en menores de 40 años. La edad media de diagnóstico se sitúa en los 80 años. Esto se debe a que se conoce al Alzheimer como una enfermedad favorecida por la vejez. Pero es importante conocer que puede aparecer en personas relativamente jóvenes.
  • Sexo. en mujeres es más frecuente su aparición probablemente, porque su esperanza de vida es mayor. 
  • Raza, no es factor determinante. Afecta a todas por igual.
  • Herencia. No es un factor relevante, representa un 1% del total de casos diagnosticados. Los antecedentes familiares si son importantes: aproximadamente la mitad tiene casos de Alzheimer en su familia.
  • Factor genético. Son varias las mutaciones de la proteína precursora de amiloide.
  • Factores ambientales. Se ha demostrado que el tabaquismo y una dieta rica en grasas son factores de riesgo claros para el desarrollo de esta patología. El pertenecer a una familia numerosa también podría estar relacionado con su padecimiento.
SÍNTOMAS
En un primer momento, los síntomas del enfermo de Alzheimer son casi imperceptibles y suelen manifestarse por leves pérdidas de memoria. Segundo el avance del tiempo, esto se hace más notorio e incapacitante para el afectado, que le limitará a la hora de realizar actividades simples y cotidianas, y otras más intelectuales, como leer, comprender, escribir o incluso, olvidarse de como hablar.
  • Síntomas neurológicos. Esta patología afecta a la memoria. Es un deterioro progresivo de la misma. A corto plazo, anula la capacidad de retener nueva información. En cuanto a medio plazo, incapacita al enfermo para recordar información personal como su profesión, cumpleaños o incluso, nombres de sus familiares más directos.
  • Alteración de la capacidad de razonar. Se manifiesta en una afasia, que consiste en la pérdida de vocabulario o incomprensión de palabras de lo más comunes. La apraxia también esto signo; es un descontrol de los músculos. Le impide al paciente realizar actividades como atarse los cordones, abrocharse una chaqueta y si vamos a fases de desarrollo más avanzadas, incapacidad para andar.
  • Pérdida de capacidad espacial. La desorientación del enfermo es de lo más habitual, incluso en lugares conocidos, como en casa.
  • Cambios en lo referente al carácter. Se vuelve muy irritable, confuso, apático, decaimiento y debilidad, falta de iniciativa personal y de espontaneidad. Se convierten en personas dudosas y temerosas del mundo que les rodea.
Para terminar, os quería dejar un vídeo muy emotivo de un caso real de Alzheimer. Me parece que es una buena manera de entender la enfermedad, poniéndonos durante unos instantes en la piel del enfermo pero principalmente, de los familiares de ellos que son los que más sufren los estragos de esta patología. Os invito a verlo porque os va a hacer reflexionar y emocionar. En él se puede ver como un hijo cuyo padre presenta Alzheimer en una de sus fases más avanzadas, se convierte en el padre de su propio padre. Todo lo que su padre hacía por él de niño ahora de toca desempeñarlo. Es una enfermedad muy dura para la gente que rodea al enfermo. Solo puedo concluir en que el Alzheimer es una enfermedad tan degenerativa que hace volver a los enfermos a su infancia. Una infancia sin conocimientos, sin capacidad de pensar y decisión, una infancia eterna. Es un reto para el cariño, tal y como se titula el siguiente vídeo.


DIAGNÓSTICO ALZHEIMER

La gente que sufre pérdida de memoria u otros posibles síntomas del Alzheimer no es consciente de que tiene un problema. Es posible que no quieran reconocer o prestar atención a sus síntomas, por lo que estos son más obvios para los familiares, amigos y personas cercanas. Con todo, no existe ningún examen que pueda probar con certeza que un paciente sufre Alzheimer, pero se puede diagnosticar con exactitud de hasta un 90%.

EVALUACIÓN DEL ESTADO MENTAL
El objetivo será ver el funcionamiento de la mente del paciente, obteniendo información sobre:

  • Si es consciente de que padece una enfermedad.
  • Si sabe la fecha, hora y el lugar en el que está.
  • Si puede recordar una serie de palabras, seguir instrucciones y resolver cálculos simples.
También le preguntaremos su dirección, el año y otras preguntas que la sitúen temporalmente, como por ejemplo el presidente de su país en la actualidad. Le pediremos que deletree una palabra al revés, y que copie el diseño de algún objeto. Es importante tener en cuenta su estado de ánimo y sus sentimientos, para poder diferenciar alguna otra enfermedad que pueda producir la pérdida de memoria y la confusión, como por ejemplo la depresión.






EXÁMENES FÍSICOS
Tomaremos su tensión arterial, auscultaremos su corazón y realizaremos un análisis de sangre y orina. Es importante también conocer la dieta del paciente y su salud en general.

La información que nos proporciona este conjunto de exámenes nos ayudará a saber si el paciente padece algún otro trastorno como diabetes, deficiencia de alguna vitamina, anemia, fallos en la función renal o hepática, anormalidades tiroideas o problemas cardíacos. Estas condiciones pueden causar síntomas similares al Alzheimer.

EXAMEN NEUROLÓGICO
Evaluaremos toda posibilidad de que la persona sufra otro tipo de problema cerebral sin ser Alzheimer. También valoraremos sus reflejos, el movimiento de sus ojos, su lenguaje, su equilibrio y su sensibilidad. Buscamos algún indicio de que se produjera un derrame cerebral, Párkinson, un tumor cerebral, una acumulación de líquido cerebral o algún otro problema que pueda estar asociado a la pérdida de memoria.

También nos puede ayudar una resonancia magnética o una tomografía axial computarizada (TAC). Estas pruebas de diagnóstico por imagen revelarán la presencia de masas tumorales, derrames, traumatismos craneoencefálicos o acumulaciones de líquidos.

Resonancia magnética.
En la imagen A, podemos ver una resonancia magnética de una persona normal. La B pertenece a un paciente con Alzheimer. Las zonas cerebrales marcadas de verde, rojo y azul representan posibles zonas afectadas por esta enfermedad. Otro ejemplo es el siguiente:


TAC de un paciente con Alzheimer.

TRATAMIENTO ALZHEIMER

En la actualidad, no existe una cura para la enfermedad del Alzheimer. No obstante, existen medicamentos que pueden ayudar a controlar o retrasar los síntomas durante un período de tiempo, sobre todo en las primeras etapas de la enfermedad. Algunos medicamentos ayudan a controlar la ansiedad, la agitación, la depresión o los síntomas psicóticos, que pueden ocurrir cuando la enfermedad va progresando. Algunos de estos medicamentos son: 

  • Inhibidores de la colinesterasa: estos previenen la descomposición de la acetilcolina, mensajero químico importante para la memoria y el aprendizaje. Lo que hacen estos medicamentos es mantener los niveles de acetilcolina altos apoyando así la comunicación entre las células del sistema nervioso. 
  • Memantine: trabaja regulando la actividad del glutamate, mensajero químico que juega un papel importante en el aprendizaje y la memoria. Esta indicado para tratar el alzheimer de moderado a severo. 
La mayor parte de las ocasiones los cambios en el comportamiento de la persona es la parte más complicada de la enfermedad. La principal causa de estos síntomas de comportamiento es el daño progresivo de las células del cerebro. Hay dos tipos de tratamientos para estos síntomas: tratamiento sin medicación y fármacos prescritos.

Lo que se hace en estos casos, cuando no se receta medicación, es: 
  1. Identificar los síntomas.
  2. Entender las causas.
  3. Cambiar el ambiente donde se cuida a la persona.

El siguiente vídeo fue realizado por el día mundial del alzheimer, en él se muestran algunas de las simples actividades que podemos hacer diariamente para prevenir esta enfermedad.


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viernes, 23 de diciembre de 2016

OSTEOPOROSIS

La osteoporosis es una enfermedad que afecta a los huesos y se caracteriza por una disminución de la masa ósea y un deterioro de la microarquitectura de los huesos, lo que supone un aumento de la fragilidad de los huesos y más propensos a romperse.
Esta patología es asintomática y puede pasar desapercibida durante muchos años hasta que finalmente se manifiesta con una fractura.
Se estima que la osteoporosis afecta a unos 75 millones de personas en Europa, Estados Unidos y Japón. Siendo más frecuente en mujeres, amenorreicas o posmenopáusicas debido a la disminución de la producción de estrógenos por los ovarios y otras carencias hormonales, aunque también pueden sufrirla los hombres, especialmente si tienen una edad avanzada.