Los síntomas de la enfermedad de Crohn dependen fundamentalmente de la parte del tracto digestivo a la que afecten. Los mismos varían pudiendo manifestarse de forma leve o grave, pudiendo aparecer para después desaparecer con periodos de reagudización.
Los principales síntomas de esta enfermedad son:
- Dolor abdominal con cólicos
- Fiebre
- Fatiga
- Anorexia
- Diarrea acuosa, que puede incluir sangre
- Sensación de necesitar defecar, incluso cuando los intestinos están vacíos
Entre los síntomas menos frecuentes, podemos incluir el estreñimiento, úlceras o inflamación ocular, úlceras bucales el drenaje de moco, pus o heces a través del orificio anal debido a la presencia de una fístula. El dolor articular puede ser un signo de desarrollo de la enfermedad de Crohn, el sangrado rectal y hematoquecia. Las encías sangrantes pueden ser ejemplo de uno de los síntomas menos recurrentes y conocidos. Por último, encontramos la sensibilización de los nódulos que pueden derivar en úlceras de origen cutáneo.